«A estas alturas se ha perdido un 93% de las variedades de cultivos alimenticios por causas antropogénicas, que cargan con la mayor parte de la responsabilidad de la situación de ecocidio del momento presente, erróneamente llamado “antropoceno”. Este manido término acaba siendo demasiado genérico y evade la compleja red de implicaciones coloniales, ecológicas y políticas tras el deterioro ecológico del planeta. En cambio “capitaloceno”, el término utilizado por, entre otros, Donna Haraway, Andreas Malm y Jason Moore, caracteriza de un modo más acertado nuestra época como la era del capitalismo.»